Migraña

Cefalea de tension

30.06.2020 19:59

También se le llama cefalea tensional.
Es el tipo de dolor de cabeza mas frecuente con una prevalencia en la población general del 78%.
Suele afectar casi por igual a hombres y mujeres, sobretodo entre los 30-39 años.

Los niños también sufren la cefalea de tensión, aunque con una prevalencia menor que varia entre 10 y 25%.

Según el patrón temporal, el médico puede poner el “apellido” a la cefalea tipo tensión de:

Episódica infrecuente: menos de un día de cefalea al mes o menos de 12 días al año)
Episódica frecuente: hasta 15 días por mes durante al menos 3 meses
Crónica: si los dolores aparecen más de 15 días por mes, en promedio, durante al menos 3 meses. Siempre aparece como resultado de la cronificación de una cefalea tipo tensión episódica, que progresivamente va empeorando y llega a hacerse diaria o casi diaria

Características habituales:

Afecta a la cabeza a modo de banda o casco
En ocasiones se describe como “no encontrarse despejado”
Típicamente es un dolor opresivo, sin fluctuaciones en su intensidad
Intensidad leve-moderada
La persona es capaz de continuar realizando sus tareas
Es raro que se tengan nauseas o se llegue a vomitar con el dolor
Es frecuente que este dolor aparezca al final del día cuando hay cansancio acumulado, o tras situaciones de estrés.

La Cefalea de tensión no es debida a subidas de tensión arterial o contracción muscular, como se cree con frecuencia. Si bien en ocasiones las subidas bruscas de la tensión arterial o contracturas musculares pueden producir dolores de cabeza similares, debe ser el médico el que establezca el diagnóstico y descarte otros posibles problemas de salud asociados.

Predisposición

Múltiples factores se asocian con una mayor predisposición a padecer una cefalea de tensión y que pueden contribuir a su cronificación, y por tanto deben tenerse en cuenta a la hora de su tratamiento:

1. La disfunción de la articulación temporomandibular (la que une la mandíbula al cráneo)
2. Trastorno de Ansieda de generalizada
3. Depresión

El diagnóstico de la Cefalea de tensión es clínico y se basa en la aplicación de los criterios diagnósticos de la IHS.

De forma general, la cefalea de tensión se caracteriza por lo siguiente:

Ataques de dolor de cabeza de entre 30 min. y 7 días que aparecen menos de 12 días al año.Sin náuseas ni vómitos
Ocasionalmente se asocia con hipersensibilidad a la luz o a los sonidos (no ambos)

Además, debe presentar al menos dos de las siguientes características:

Localización bilateral
Calidad opresiva (no pulsátil)
Intensidad leve o moderada
No empeora con la actividad física habitual (andar, subir escaleras...)

En ocasiones es difícil de diferenciar de la migraña sin aura, ya que además una misma persona puede presentar ambas formas de cefalea.

Cuando el cuadro clínico (es el conjunto de síntomas) es característico de cefalea tensional y la exploración física y neurológica es normal, no es preciso realizar ningún estudio complementario de tipo analítico o de neuroimagen para confirmar el diagnóstico. Sin embargo, la reiteración de la cefalea suele originar gran preocupación al paciente que habitualmente suele demandar la realización de pruebas para descartar la posibilidad de una cefalea secundaria a una lesión craneal.

Un dato relevante a la hora de efectuar el diagnóstico es la frecuente asociación que tiene esta forma de cefalea con la ansiedad, la depresión etc., así como con otros problemas de dolor crónico y disfunción de articulación de la mandíbula.

RECUERDE

Será de ayuda para el médico si se toma la tensión arterial uno de los días que presente el dolor de cabeza y se compare con días en los que no tenga cefalea

Lo primero que hay que saber es que la cefalea de tensión es benigna, es decir, en las formas episódicas, el dolor cede por sí mismo y no impide que se pueda realizar una vida normal. Por lo general con la toma de un analgésico convencional el dolor desaparece.

Es en la cefalea de tensión crónica donde el dolor es más frecuente y acaba siendo mas molesto por su persistencia que por su intensidad, es donde hay alternativas de tratamiento.

En muchas ocasiones no hace falta tratarla porque solo con tener la certeza que no existe una lesión cerebral, quien la padezca se queda tranquilo y prefiere no tomar medicación preventiva. Una vez más, el diagnostico lo debe establecer el médico, y entre el paciente y el médico sí se puede discutir las opciones de tratamiento.


Técnicas psicológicas y conductales

⚬Biofeedback: con las técnicas de biorretroalimentación con electromiografía (EMG biofeedback) el paciente aprende a controlar su grado de tensión muscular, gracias a la información que recibe de la actividad del músculo sobre los que se colocan los electrodos. Esta relajacion muscular ayuda a modular la activación del sistema de dolor.
⚬Terapia cognitivo-conductual

Fisioterapia
⚬Ejercicios de estiramiento y de reeducación postural

Acupuntura, punción seca y bloqueos nerviosos

⚬Informarse bien antes sobre las técnicas empleadas y el establecimiento que propone estos servicios antes de tomar una decisión

Medicación preventiva

⚬Generalmente son fármacos del grupo de los antidepresivos. No todos los antidepresivos valen para controlar el dolor, así que su medico deberá escoger aquellos de documentada eficacia en controlar el dolor de cabeza.